Gastronomía
“Máchica de zango delicia escondida en Puzhío”
La máchica zango, que se obtiene del maíz tostado y molido, cuya preparación es con carne de cerdo y fréjol fue uno de los platillos preferidos por los antiguos habitantes de Puzhío.
Las mujeres eran expertas en la preparación de arroz de harina de maíz, la sopa de “chío” blanco (papas) con fréjol. La colada de “mishqui” (pulcre o zumo de penco con maíz molido).
El “shimillo”, María Teresa Salinas, de 80 años de edad lo recuerda, una sopa de maíz “shima” molido de pala (grueso) con carne de puerco o quesillo, fréjol o papas. “Que rico que era este alimento que se ha perdido”.
Antes se cocinaba siempre en las ollas de barro y en leña, por eso nuestros hijos e hijas eran fuertes y sanos.
Yolanda Suárez dice que sus abuelos preparaban café de habas y maíz, “que sabroso que era”. También el “palapiche” un preparado de maíz tostado y molido con leche y panela.
El ají con pepa que se servía por separado.
El “pepucho” sopa de pepa de zambo con quesillo y huevo; colada de ocas y zambo; y la sopa de zanahoria blanca eran otras delicias que hacían nuestros abuelos y que se ha perdido en la comunidad.
El Cuy con papas
“Tradición que perdura”
El cuy con papas, el mote pelado y la chicha de jora son los platos que todavía perduran en la parroquia, al igual que en otras zonas andinas. Son platos que se preparan exclusivamente para las fiestas.
Preparación
El cuy es pelado y se retiran las vísceras, se procede a preparar los aliños para lo cual se licuan todos los ingredientes y con esta preparación se aliña el cuy y se lo deja reposar durante una noche.
Una vez macerado el cuy durante 12 horas, está listo para ser llevado a la brasa, donde se cuese por una hora y media, tiempo en el cual alcanza su perfecta cocción.